Hechizo para atraer la fortuna
¿Necesitas ayuda extra para la fortuna? Para tristeza de muchos el dinero es fuente de preocupación, trabajo extenuante y a veces locuras. Los crímenes más atroces se comenten muchas veces por dinero, empujados a ciegas por la necesidad. La raza humana no nace con este instinto material, es la sociedad la que dobla el pensamiento del joven sin empleo y le dice “tu no sirves para trabajar, nadie te aprueba, nadie confía en ti, rata callejera” y el joven, sin oportunidad y voluntad de demostrar lo contrario se lanza tras la primera cartera que ve en su camino. Alejamos el dinero de nosotros con este tipo de pensamiento, “no podemos”. Y mientras más tiempo pensemos de esa forma el dinero más tardará en llegar.
Queremos ser honrados y trabajamos duro, pero sigue nuestro cerebro influyendo en el universo que nos rodea, limitando nuestra capacidad y esquivando oportunidades inconscientemente. Y es asi en cada aspecto de nuestra vida, incluso para el amor. Para comprender un poco el poder de la mente hablaremos de Egipto.
Ninguna cultura nos maravilla tanto en su culto a las fuerzas sobrenaturales que la egipcia. Su simbología es digna de estudios especializados y hasta el día de hoy siguen los descubrimientos acerca de su culto a la muerte y sus diferentes amuletos y talismanes. Tenían además un amplio repertorio de encantamientos para cualquier necesidad.
La conocida figura triangular no era solamente un sello característico de su cultura, era un símbolo de poder, de crecimiento, estabilidad, una alabanza perpetua a Dios que lo proporciona todo, Claro que ellos no lo llamaban Dios sino Ra, Isis y demás deidades antiguas
Este ritual no está dirigido únicamente a las personas que desean obtener la suerte económica, sino también a las que de un modo genérico esperan lograr una mejora en su vida en cualquier sentido. Por eso las aplicaciones del ceremonial son casi infinitas y cada lector debe ajustarías a sus necesidades particulares.
Necesitarás: 1 bandeja pequeña, no muy profunda. 4 conos de incienso de pino. Sal mezclada con azúcar. Una imagen de aquello que quieres conseguir y una hoja blanca para la petición.
En el recipiente coloca la hoja de papel con tu petición escrita en ella, coloca encima la fotografía y esparce la sal encima de ambos. Concéntrate mucho en tu propia conducta, la humildad es muy buena pero nunca olvides que humilde no significa idiota. Tu mereces más de lo que te permites. Esparce la sal y repite: “merezco más de lo que me permito”. Mereces un mejor salario, mereces un mejor empleo, mereces estudiar más.
Para terminar saca la fotografía del recipiente y con una tachuela clávala en un lugar muy visible de tu casa, que la imagen te observe todo el tiempo. Y con la hoja y la petición harás lo siguiente: sin dejar caer la sal dobla la hoja y has un pequeño sobre. Ciérralo y guárdalo en un lugar secreto hasta que tu deseo sea cumplido.